El
viaje de Sora comenzó en 2002 con el lanzamiento del primer Kingdom
Hearts en PlayStation 2, y después de diecisiete años y ocho
juegos, por fin tenemos la “tercera parte” en nuestras manos.
Kingdom Hearts III no solo es la culminación de la saga de Xehanort,
sino también el final de la larga espera que hemos soportado los
fans para ver el desenlace de esta historia. Después de tanto
tiempo, las expectativas eran muy altas, y los muchos trailers que
iban saliendo lo único que provocaban era que subieran aún más,
pero después de jugarlo ¿valió la pena tantos años de espera?
Kingdom
Hearts III empieza inmediatamente después de los hechos ocurridos en
Kingdom Hearts 3D: Dream Drop Distance,
porque si pensabas que con jugar a Kingdom Hearts y
Kingdom Hearts II te valdría para entender el III te equivocas,
todos los juegos que han salido hasta este momento son importantes en
la historia. No te preocupes, Square Enix ha pensado en todo y en la
pantalla de inicio tienes la opción de ver cinco vídeos que resumen
la trama bastante bien.
Nada
más escuchar las primeras notas de Face my Fears podías notar un
sentimiento conocido, pero a su vez diferente y nuevo. Hace
diecisiete años tuve la misma emoción cuando lo jugué por primera
vez, fue un reencuentro con mi niña interior, la sensación de que
algo muy querido vuelve a ti de nuevo.
Square
Enix sabe jugar con nuestros sentimientos y lo hace muy bien, y eso
lo demuestra en las preciosas cinemáticas que te encontrarás
durante todo el juego. Y es que esta entrega llega finalmente a la
nueva generación, por ello necesitaban un nuevo motor gráfico que
pudiera suplir todas sus necesidades, y eso hace Unreal Engine 4.
Porque Kingdom Hearts III se puede definir de muchas formas, pero la
palabra que yo utilizaría para describirlo es “bonito”. Es una
maravilla visual, tanto que te quedas absorto viéndolo, como si de
una película se tratara, pero tiene un problema: a veces
literalmente parece una película. Sí, hay muchas cinemáticas,
quizá demasiadas, es cierto que tenían muchas preguntas que cerrar,
pero quizá responderlas todas con vídeos no ha sido una buena idea.
Aunque la calidad de los vídeos es innegable, a veces sientes que no
te dejan jugar.
Uno
de los apartados que destacaría sería la jugabilidad, Square Enix ha observado las diversas mecánicas de todos los juegos
de la saga, tanto sus errores como sus aciertos, y con todo lo
aprendido crearon las del Kingdom Hearts III. Puedes disfrutar dedicándote
a lanzar magia, golpear con la llave espada, o simplemente lanzando
ataques especiales, el juego te da tantas opciones a la hora de
pelear que cada escenario parece único. Aunque ya no están las
fusiones (una gran pérdida) han sabido suplirlo con las
transformaciones de las armas y los ataques combinados, dándonos
diferentes formas de atacar al enemigo y de destrozarlo con los
nuevos combos. La jugabilidad tiene mucho ritmo, es muy ágil y
divertida, cambiando en cada mundo con diferentes mecánicas,
actualizándose sin dejar de lado el estilo propio de la saga.
Si
algo es característico en todos los juegos de Kingdom Hearts es la banda sonora de la mano de Yoko Shimomura, y es que en esta última
entrega han sabido adaptar al juego tanto las antiguas canciones como
las nuevas en los momentos más acertados, dotando algunos
enfrentamientos de tal emoción que esperabas que no se acabaran
nunca. No puedo hablar de la música de Kingdom Hearts III sin hablar
de Hikaru Utada y de sus dos grandes temas, Face my Fears, para el
vídeo inicial, y Don’t Think Twice, para el vídeo final; si
tenías miedo de que no pudiese alcanzar a los míticos Simple and
Clean o My Sanctuary, tranquilo, cumplirá con creces tus
expectativas.
Con
todo lo nombrado anteriormente se podía pensar que tenían el camino
allanado para hacer un gran título a la altura de las expectativas
de todos los fans, sin embargo existe un gran pero en todo el juego:
la historia. Después de tantos juegos y tantas puertas abiertas, los
fans esperábamos que supieran cerrar todas las incógnitas que
habían abierto a lo largo de la saga, pero no ha sido así. A pesar
de todos los años de espera, irónicamente Kingdom Hearts III parece
un juego que le ha faltado tiempo de desarrollo, la historia no
consigue responder a nuestras preguntas con soltura y a algunas
partes de la trama como uno podría esperar. Y en lugar de contestar
a las incógnitas con firmeza, parecen dubitativos y se dedican a
abrir otros misterios en lugar de centrarse en los que ya tenían. No
han sabido concluir la saga de Xehanort y tampoco han sabido tratar a
sus personajes como se merecían, dejando de lado la esencia de los
mismos para meternos con calzador algunas escenas que podrían
definirse como “impresionantes” o “bonitas” pero que
contradicen totalmente la base establecida de la historia y de los
personajes.
No,
no es el juego que yo esperaba, y aunque lo he disfrutado muchísimo
y ha conseguido emocionarme en ciertos momentos, no es la conclusión
que imaginaba. Pensaba que después de tanto tiempo de espera habrían
conseguido hacer el juego que creo que nos merecíamos, pero no han
evolucionado desde las primeras entregas. No sirve de nada mostrarnos
tantos misterios si luego no sabes resolverlos, y no sirve de nada
mostrarnos partes que parecen fundamentales para el desarrollo de la
historia e ignorarlas por completo después.
Me
ha gustado mucho, y en muchos apartados lo considero el mejor de la
saga, pero no han sabido cerrar la historia como debían, se han
estancado en la fórmula, que después de tanto tiempo está algo
gastada, en lugar de adaptarse a la nueva generación de videojuegos.
Cualquier fan de la saga disfrutará de este título y recordará
algunos momentos con cariño, pero otros lo recordaremos como el
juego que pudo ser y no fue.
Hola Noe! Qué buena forma de empezar el blog! Personamente lo he disfrutado y me ha emocionado muchísimo, pero esperaba que ciertas cosas se resolvieran de una forma mucho más épica (es lo que tienen las expectativas, supongo). Los gráficos son fantásticos, pero a estas alturas algunos detalles (teniendo en cuenta el tiempo de desarrollo) deberían estar más logrados. Por otro lado, es genial tener tanta variedad en las batallas, pero son tan insultantemente fáciles aun jugando en modo experto que en ese sentido también me ha dejado un sabor agridulce. Por último, el gran fallo que yo destacaría es la forma de incluir los mundos Disney en esta ocasión, pues no tienen ningún tipo de relevancia en la historia (algo que sí sucedía en otras entregas) y por eso me han dejado bastante indiferente en algunos casos. Espero que la cuarta entrega no se haga esperar otros 12 años y llegue con un argumento más sólido.
ResponderEliminarMay your heart be your guiding key �� Hope we find some ingredients around here
¡Hola Laura! Me alegra que te guste, no podía empezarlo con otro juego. Creo que la mayoría de los fans hemos llegado a la misma conclusión, buen juego, pero que podría haber sido el mejor. Como tarde otra década en sacar el siguiente, Square Enix acabará enterrando a todos los fans antes de acabar la saga.
EliminarDonald: Face it, you're just a half-pint.
Goofy: But the three of us together make a whole pint!
Sora: Pint and a half!